El presidente de Acesur se convierte en el segundo accionista de referencia del fabricante de Carbonell y Hojiblanca
Movimiento de calado en el sector aceitero que implica a dos de los principales grupos empresariales que operan en el mercado mundial. Juan Ramón Guillén Prieto, presidente de la sevillana Acesur y uno de los industriales del aceite de oliva más destacados, se ha convertido en el segundo accionista de referencia de la multinacional Deoleo, fabricante de marcas como Carbonell y Hojiblanca, con una participación que supera el 5%.
Según ha comunicado el empresario a la Comisión Nacional del mercado de Valores (CNMV), a fecha de 30 de junio, Guillén posee el 5,072% del capital de Deoleo, un porcentaje que lo convierte en segundo accionista, después del fondo de capital riesgo CVC Capital Partners, primer socio en la compañía que ahora preside Ignacio Silva, que controla el 56,4% del capital.
Esta operación tiende puentes accionariales entre Acesur (La Española y Coosur) y Deoleo y se produce en paralelo a la entrada en Deoleo de la sicav luxemburguesa de gestión de patrimonio familiar Global Income, a través de Juan José Rodríguez-Navarro, entra en el capital de Deoleo con casi el 4% de las acciones, según consta también en los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
En concreto, Global Income se ha hecho con un total de 19,8 millones de títulos, que están valorados en más de 3,3 millones de euros, según los precios actuales del mercado.
La entrada de Global Income en el accionariado de la multinacional oleícoca se produce días después de que las nuevas acciones de Deoleo regresaran al parqué, tras la ampliación de capital y concluir «con éxito» el proceso de reestructuración con los acreedores y en el tiempo previsto, a pesar de la incertidumbre que ha marcado el escenario económico derivada del Covid-19.
Como resultado de la reestructuración financiera, la deuda sindicada del grupo ha pasado de 575 millones de euros a 242 millones, lo que supone 333 millones menos, con lo que la deuda financiera neta se ha reducido en 375 millones de euros.
Además, el grupo ha rebajado el coste de intereses en aproximadamente un 60%. «Esto, sumado a la positiva evolución del negocio que se reflejó a cierre del primer trimestre, fortalece la capacidad de la compañía para cumplir con el plan de negocio a largo plazo», ha resaltado la sicav.